Obama en Cuba y los beneficios de la libertad

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Sergio Berensztein

Resumen

En el año 1973, en plena Guerra Fría, el líder de la revolución cubana Fidel Castro participaba en una de sus habituales reuniones con la prensa internacional. El periodista Brian Davis, de una agencia inglesa, le preguntó: "¿Cuándo cree usted que se podrán restablecer las relaciones entre Cuba y Estados Unidos, dos países tan lejanos a pesar de la cercanía geográfica?" Fidel lo miró fijamente y respondió: "Estados Unidos vendrá a dialogar con nosotros cuando tenga un presidente negro y haya en el mundo un Papa latinoamericano". Cuarenta y tres años, esa predicción se cumplió a finales de marzo de 2016. A pesar de haber sido publicada incluso por la Central de Trabajadores de Cuba, la historia es apócrifa. No obstante, refleja el giro copernicano en los asuntos internacionales que esta reaproximación implica.

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Artículos